Entender el ciberacoso

El ciberacoso es el acoso que tiene lugar a través de dispositivos digitales como teléfonos móviles, ordenadores y tabletas.

Puede ocurrir a través de:

  • Texto

  • Redes sociales

  • Foros en línea

  • Juegos en los que la gente puede ver, participar o compartir contenidos

El ciberacoso incluye enviar, publicar o compartir contenidos negativos, dañinos, falsos o mezquinos sobre otra persona.

Puede consistir en compartir información personal o privada sobre otra persona, causándole vergüenza o humillación. En algunos casos, el ciberacoso llega a ser ilegal o delictivo.

Preocupaciones especiales

Con la prevalencia de las redes sociales y los foros digitales, los comentarios, fotos, mensajes y contenidos compartidos por las personas a menudo pueden ser vistos tanto por extraños como por conocidos. El contenido que una persona comparte en línea -tanto su contenido personal como cualquier contenido negativo, mezquino o hiriente- crea una especie de registro público permanente de sus opiniones, actividades y comportamiento.

Este registro público puede considerarse como una reputación en línea, a la que pueden acceder:

  • Escuelas

  • Empresarios

  • Colegios

  • Clubes

  • Otros que investigan a una persona ahora o en el futuro

El ciberacoso puede dañar la reputación en línea de todos los implicados, no sólo de la persona acosada, sino también de quienes lo hacen o participan en él. El ciberacoso es un problema único porque puede ser..:

  • Persistente - Los dispositivos digitales ofrecen la posibilidad de comunicarse de forma inmediata y continua las 24 horas del día, por lo que a los niños que sufren ciberacoso puede resultarles difícil encontrar alivio.

  • Permanente - La mayor parte de la información comunicada electrónicamente es permanente y pública, si no se denuncia y elimina. Una reputación negativa en Internet, incluso en el caso de los acosadores, puede repercutir en las admisiones universitarias, el empleo y otros ámbitos de la vida.

  • Difícil de detectar - Dado que los profesores y los padres pueden no oír o ver el ciberacoso, es más difícil de reconocer.

Leyes y sanciones

Aunque todos los estados tienen leyes que obligan a las escuelas a responder al acoso, muchos estados no incluyen el ciberacoso en estas leyes ni especifican el papel que las escuelas deben desempeñar en la respuesta al acoso que tiene lugar fuera de la escuela.

Los centros escolares pueden tomar medidas, ya sea por imperativo legal o en virtud de políticas locales o escolares que les permitan imponer medidas disciplinarias o de otro tipo. Algunos estados también tienen disposiciones para abordar el acoso si afecta al rendimiento escolar. Puedes informarte sobre las leyes y políticas de cada estado, incluyendo si cubren el ciberacoso.

Fuente: StopBullying: www.stopbullying.gov